¿Qué fue de Artetxe?

Cita de Beni Areeta:

Cita de Olorin:
Sigue escribiendo en el Deia pero ya no aparece en Onda Vasca.

De hecho, hoy escribe un artículo en el Deia y, sin que sirva de precedente, creo que escribe con respeto en relación a la situación de Djalo. Cosa que Monje no puede decir.

Ésto es lo que comenta:

La tentación de contrastar el rol de Maroan con el de Djaló da para otra reflexión. Uno goza de la confianza y de los minutos que cualquiera precisa para desarrollar su trabajo y mostrar sus condiciones; el otro, en absoluto. Se podrá alegar que Djaló no se ha ganado ese estatus, pero estaría bueno que de repente, tras dos meses ajeno a la competición y cuando desde el verano no ha conseguido integrarse en la dinámica del juego, lo borde precisamente en una cita donde, mira qué casualidad, no está rodeado de los hombres que realzan la propuesta ofensiva del equipo.

Los gestos de desesperación que dejó en cada intervención frustrada por sus ansias de agradar y la ausencia de colaboración, aconsejan atenuar la crítica. Nadie lamenta más que Djaló su pobre rendimiento.

Artetxe escribe con respeto sobre la situación de Djalo. Por lo menos con más respeto del que tiene Jose Manuel Monje (su jefe) al cual parece que Djalo le debe dinero, como también parecía en el caso de Sergio Navarro. Ahora bien, lo que está claro es que este es el tercer artículo ya que se publica en este periódico en que se dice que Djalo realizó un partido malo. No sé si en el grupo noticias tienen otras televisiones o usan otras gafas diferentes al del resto de los mortales pero este artículo igual que los otros dos y el editorial del señor Monje en la radio están basados en una MENTIRA. En ningún caso Djaló realizó un partido malo, es más, yo diría que fue el mejor jugador de campo del primer tiempo.

Djalo ha tenido partidos muy malos, si alguien quiere meterle caña tiene motivos de sobra. Lo que no se puede hacer es decir que también ha jugado mal cuando ha hecho un buen partido. Es, además, poco inteligente, lo que deberíamos hacer es favorecer entre todos que Djalo esté contento y gane en confianza para rentabilizar la inversión y que saque el futbolista que lleva dentro, a priori, sería bueno para todos. Desgraciadamente todos sabemos quién está al frente de los deportes en el grupo noticias y como funciona esta persona en relación al Athletic. A sus amigos les defiende lo indefendible y a los que no lo son busca cualquier motivo para atacarles, normalmente desde argumentos faltones, populistas, rudimentarios y demagógicos. En este caso Djalo es uno de los escasos argumentos que Monje tiene para atacar a esta JD. Él puede decir misa, aquí lo que le jode es que estos directivos y ejecutivos deportivos han demostrado por comparación que los directivos y ejecutivos deportivos que tuvimos en la época de Elizegi (y a los que el proporcionó primero altavoz en campaña electoral y luego durante el mandato defensa acérrima llegando a erigirse prácticamente en su portavoz oficioso) no estaban, por decirlo de manera suave, a la altura de lo que se merece una institución como el Athletic Club. Nadie dura tres años y medio en el cargo de presidente si se percibe que ese alguien lo está haciendo bien y tres cuartos de lo mismo aplica para las cuentas y presupuestos que le tumbaron los socios compromisarios en varias ocasiones. Nos guste o no, los datos y la realidad son muy tozudos.

Monje se hartó de decir en esa época que era lo que había. Cuando no se podía fichar a nadie, era lo que había. Cuando no se captaba un sólo jugador de renombre que no fuese bizkaino era lo que había. Cuando Nico y Sancet no estaban renovados a dos años de finalizar contrato, era lo que había. Cuando palmábamos treinta kilos al año, era lo que había (culpa de la filosofía, supongo). Bastante hacíamos, y si pensabas que toda aquella gestión era mediocre, entonces no estabas remando a favor del Athletic (se ve que el no se acordaba de los palos diarios que daba en la época de Josu Urrutia). Ahora el equipo ha ganado un título, va a Europa de forma recurrente, tiene a sus pilares renovados, capta la práctica totalidad del talento vasco, se ha revertido la situación económica de arriba a abajo y resulta que se centra en darle palos a Djalo. Hace dos años eran Iñigo Martínez, Sergio Navarro y el Bilbao Athletic. Todo menos reconocer que dio altavoz a una JD amateur, que puso al club en riesgo y que el tiempo ha demostrado que no estaba capacitada para dirigir al Athletic. Más le valdría callarse, pero es tan imprudente que sigue erre que erre con sus cosas sin percibir que ya le tenemos calado.

Cuando Djalo funcione, que funcionará, no le quedará otra cosa que callarse e irse a la misma cueva a la que mandó él a todo el mundo cuando Kenan Kodro marcó aquel gol en el Sadar. Bueno, ya debería estar en esa cueva desde hace tiempo, que vendió la marcha de Iñigo Martínez como el fin del mundo y resulta que a día de hoy nadie se acuerda de él y el equipo va como un tiro. Es una lástima pero cuando en vez del Athletic, te importan tus amigos y dedender tu trinchera pues suele pasar que se acaba haciendo un ridículo estrepitoso, como están haciendo el Deia, Onda Vasca y Monje como director de deportes del Grupo Noticias y responsable de la línea editoria.

10-12-2017, laterales del futuro Athletic, Imanol y Areso.