El Athletic cumple el trámite con apuros
Dos goles de Adu Ares, el más incisivo, llevan a la segunda ronda a un equipo que se llevó un susto por el gol del Rubí en los últimos minutos

miércoles, 01 de noviembre de 2023 | Athletic Club
Juanma Mallo | aupaAthletic.com
Tuvo que sufrir el Athletic este miércoles para cumplir el trámite de eliminar al Rubí, un equipo de regional que compitió de maravilla y nunca perdió la cara al partido, y presentarse en la siguiente ronda de su torneo, de la Copa del Rey. Dos goles de Adu Ares, el más incisivo, quizá el único futbolista que dijo aquí estoy en Can Roses, encarrilaron el encuentro. Pero a falta de cinco minutos, una diana de los catalanes sembró de inquietud al universo rojiblanco. Temblores. ¿Empatarán? Por suerte no, no ocurrió y los bilbaínos se metieron en una eliminatoria cuyo rival conocerá el martes. Vuelve, por tanto, el cuadro vizcaíno con sudores fríos después de un partido en el que solo había cosas que perder. La cara de Txingurri era un poema en la banda en el tiempo de descuento, se temía lo peor... Pero no. El Athletic sigue en la competición del k.o.
Con una alineación repleta de suplentes -el único posible titular era Vesga que salía de lesión-, el Athletic firmó dos ocasiones nada más comenzar el encuentro. No obstante, Berenguer y Raúl se encontraron con Rafa Leva. Poco después, el turno fue para Adu Ares. Tampoco, aunque en esta ocasión dirigió mal el disparo. Era el Rubí un equipo ordenado, junto, que tenía las ideas claras. De vez en cuando, hacía una excursión hacia la portería de Julen Agirrezabala, que se estrenaba este curso, pero su idea era estar bien colocados en su campo.
Y por eso el Athletic se las vio y se las deseó para crear ocasiones en la primera mitad. Hubo algún intento más de Raúl García, también de Berenguer, un disparo defectuoso de Unai Gómez, también otra de Adu Ares... Pero la historia fue que al descanso, el Rubí resistía y mantenía el empate a cero inicial. SI algún aficionado rojiblanco había pensado que su equipo iba a hacer como el Betis (0-9 al descanso) o el Getafe (0-12 al final) estaba muy equivocado.
Entre otras razones porque el campo era pequeño (el Betis se enfrentó al Hernán Cortés en Almendralejo y los madrileños al Tardienta en Huesca), el césped artificial hacía que el balón botara de forma irregular y, para terminar, varios futbolistas se resbalaban con facilidad: Berenguer, por ejemplo, lo hizo a los 20 segundos. Con todo eso, el cuadro bilbaíno se fue de vacío a un descanso al que se llegó con un par de arreones locales.
No hubo cambios al descanso. Y es cuando empezó el Athletic a buscar la diana. No podía permitirse sufrir un sonrojo. Egiluz y Nolaskoain tuvieron un par de oportunidades. Y casi de inmediato, Adu Ares pescó un balón en el área -puede haber un fuera de juego previo de Raúl García- y le metió la pelota por debajo de Leva, el meta local. Y casi de inmediato Unai Gómez pudo anotar el segundo, pero no. Sí lo logró Ares de cabeza, tras un buen centro desde la izquierda. 0-2. Respiro. Y al cuarto de hora de la segunda mitad, Peru apareció para sacar una pelota que ya entraba. Bufff. Agirrezabala salió mal, Muñi envenenó la jugada y surgió Nolaskoiain.
A falta de 25 minutos, cuestión de regular esfuerzos, salió Galarreta por Vesga. De ahí al final del duelo, el cuadro bilbaíno congeló el duelo. Dejó que pasaran los minutos con alguna acción de los locales, como una falta, que provocó una pizca de inquietud en el Athletic. Una sensación que se incrementó a falta de cinco minutos con la diana de los locales. Incluso probaron varias veces a Agirrezabala. Y en el último segundo botaron un saque de esquina que casi provoca la prórroga. Pero no sucedió. Menos mal. Alivio pero también agonía.
